¿Sabes qué es la rosácea? Se trata de una alteración que provoca enrojecimiento, vasos sanguíneos visibles y granos en las mejillas. Suele confundirse con acné. Existen varios factores que pueden ser causantes como la genética, el clima, problemas de circulación y hasta el estrés.
Aparecen en cualquier momento esos brotecitos rosas en la piel,aunque existen ciertos detonadores ¿Quieres conocerlos?
1.- Alteraciones hormonales, que obedecen a factores estresantes generados por la producción de cortisol, el cual tiene la habilidad de descomponer el colágeno. La melatonina, hormona responsable de ayudar a que tengas ganas de dormir, también ayuda en la reparación de la piel durante el sueño. El estrógeno, la progesterona y la testosterona, hormonas asociadas al sexo, no se sabe con exactitud que ocurre, pero si se ha detectado un fuerte vínculo de la rosácea en la piel, especialmente en mujeres que atraviesan por cambios hormonales, como en el embarazo o la perimenopausia.
Tip: los dermatólogos sugieren llevar un diario, para poder precisar qué desencadena los brotes de rosácea.
2.- La microbiota de la piel, desempeña varias funciones que van desde proteger de agentes patógenos, mantener la dermis hidratada y restringir el daño generado por el estrés oxidativo. Lamentablemente cuando hay un desequilibrio, pueden detonarse alteraciones como la rosácea.
Tip: recuerda que no debes tocar las erupciones y tampoco tallarlas con la finalidad de desaparecerlas, pues podría ser contraproducente. Lo mejor es mantener la calma.
3.- Cuidado con tu alimentación, se ha detectado que algunos irritantes pueden ocasionar episodios. La Sociedad de Rosácea, informa que el vino tinto, café, té, cítricos, nueces, espinacas, soya e hierbas picantes, son causantes de los brotes. Recuerda que no todas las personas son iguales, por ello, es muy probable que tú tengas reacción sólo a algunos; en este caso, también es vital llevar un registro de los alimentos que provocan una reacción desfavorable.
Tip: trata de no ingerir los productos que te causen rosácea, para mantenerla bajo control más fácilmente.
Si sospechas que tienes rosácea lo mejor es acudir con el dermatólogo, para que sea él quien dictamine si lo es y en caso de ser necesario, te indique el tratamiento a seguir.