Cuando te encuentras deprimido, prefieres los colores oscuros para vestirte y sientes que la energía desaparece de tu cuerpo. También hay otras claves que lo reflejan, como: el lavatrastes lleno de trastos sucios, pilas de ropa limpia sin doblar y desorden en tu escritorio.
No siempre puedes tener tu entorno inmaculado. Tal vez en un ataque de prisa, revuelves los cajones buscando tu camisa favorita para la junta o alborotas todos los archivos del escritorio, porque no encuentras el estado financiero que estás obligado a presentar en la reunión, el cual ya habías impreso.Un hogar patas arriba o un escritorio donde nunca encuentras nada, podrían ser signos de depresión.
Un estudio realizado por la universidad de Nuevo México, detectó que existe un vínculo entre el desorden y la capacidad de sentir placer en un espacio. Lo que es peor, el desorden puede incrementar los niveles de cortisol, capaz de hacerte sentir terriblemente estresado y disminuir tu nivel de concentración.
Acciones benéficas
Así que te tenemos algunos consejos, para ayudarte a poner todo en su lugar nuevamente en tu hogar, ya que el orden genera equilibrio, aumenta la productividad y crea un ambiente tranquilo.
- Paso a pasito,no quieras ordenar todo en un día, será imposible y te sentirás frustrado. Puedes empezar por un cajón de ropa, una gaveta del escritorio o uno de los estantes de la despensa. Eso sí, es vital ser constante.
- Establece un límite de tiempo, 30 minutos o 45 serán suficientes para limpiarlos y dejarlos en orden.
- Designa aliados para el orden, por ejemplo algunas cajas transparentes, pueden servir para almacenar en la cocina y te permitirán ver su contenido; será menos probable que crees un caos nuevamente. En el tocador, cestos para cosas pequeñas como accesorios, prendedores y cremas, podrían ser la clave.
- Concéntrate en tu tarea, aleja el móvil de tus manos, apaga la televisión y mejor escucha tu música favorita; la idea es que evites las distracciones.
- Pregúntate si todo lo que tienes en el clóset o en los armarios, lo usas; de no ser así, desecha lo que esté roto y dona lo que se vea en buenas condiciones.
- Disfruta tus espacios, una vez que termines de ordenar la cocina, como ingerir una rica cena en la cocina. Usa tu oficina para realizar una meditación, una vez que esté ordenada. La idea es celebrar, que por fin hay orden en tu casa o áreas de trabajo. Notarás como los niveles de estrés disminuyen y te sentirás menos cansado.