¿Sabías que el kéfir es una proteína que puedes incluir en tu batido? Ya sea como desayuno, snack o simplemente para acompañarte mientras te ejercitas. Se trata de una bebida fermentada a temperatura ambiente durante 14 a 18 horas; ideal para personas que sufren de intolerancia a la lactosa.
También es apto para cuidar la microbiota intestinal, además de ofrecer otros beneficios a la salud. ¿Listo para conocerlos?
- Mejora la digestión: contiene bacterias benéficas que ayudan a optimizar la digestión y reducir los síntomas de trastornos digestivos, como el síndrome del intestino irritable, la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn.
- Refuerza el sistema inmune: los probióticos en el kéfir, tiene la habilidad de fortalecer el sistema inmunológico, así como combatir bacterias y virus dañinos, que suelen provocar infecciones y alergias.
- Baja la inflamación: posee compuestos que reducen la inflamación en el cuerpo, la cual está relacionada con una variedad de problemas de salud como la artritis, las enfermedades cardíacas y el cáncer.
- Fortalece la salud ósea: es una buena fuente de calcio, que es esencial para tener huesos fuertes. También posee vitamina K2, responsable de agilizar la absorción de calcio.
- Estabiliza los niveles de colesterol: algunos estudios sugieren que consumir kéfir logra disminuir los niveles de colesterol LDL ("malo") en la sangre, el cual es un factor de riesgo de enfermedad cardíaca.
- Ilumina la piel: los probióticos del kéfir aportan bienestar a la piel, al reducir la inflamación y promover el crecimiento de bacterias saludables en la microbiota de la piel, por lo que adquiere una apariencia radiante.
Como te habrás dado cuenta, el kéfir es un nutriente que ofrece más de un beneficio a la salud. Puede ser consumido a diario, no contiene azúcar, por ello puede ser considerado como un ingrediente de una dieta saludable y equilibrada.