No es necesario salir al campó para realizar este tipo de ejercicios, la mayoría de las caminadoras tienen programas pre-establecidos que cambian la inclinación a medida que avanzas. Lo ideal es emplear los que caminan cuesta arriba y cuesta abajo, para simular un entrenamiento en el campo.
Más que un cambio divertido
En efecto no sólo evitará que te aburras también ofrece ganancias a tu salud e incluso a tu figura, como:
- Mejorará el rendimiento, al mismo tiempo que te mantendrá motivado. Puedes empezar caminando hasta que adquieras la condición adecuada para correr, sobre la misma cinta.
- Incrementa el ritmo cardíaco, se elevará en relación a mayor inclinación sumado a la intensidad de la actividad, hasta llegar al punto máximo. Sin embargo, debes saber que el aumento se mantiene aún si la velocidad disminuye. Con esto mejorará tu condición e incluso oxigenaras mejor al cuerpo y al cerebro.
- Trabajas más músculos, cuando caminas sobre una superficie plana, sólo se fortalecen los cuádriceps. Pero, en este caso también se tonifican los isquiotibiales y los glúteos que forman parte de la cadena posterior. Te encantará porque disminuye el riesgo de fracturas, optimiza la postura e incluso eleva el desempeño deportivo.
- Pantorrillas y espinillas también se benefician, las investigaciones señalan que estos músculos trabajan más en una pendiente elevada.
- Agiliza la quema de calorías, para mayores resultados aumenta la intensidad por períodos y correr, después caminar. Los estudios arrojan que se puede elevar hasta en un 17% la quema de calorías.
Sólo recuerda un detalle importante, es vital usar un calzado adecuado para realizar esta actividad, lo que podría disminuir el riesgo de lesiones. Mantenerse hidratado es vital en cualquier ejercicio. Este tipo de desafíos te prepara para largas caminatas en exteriores.